5 días de comida sostenible: un menú zero waste.

¡Bienvenidos a nuestro nuevo artículo! En esta ocasión, queremos invitarte a unirte a nuestro reto de 5 días de comida sostenible. ¿Te has preguntado alguna vez cómo puedes reducir tu impacto en el medio ambiente a través de lo que comes? En este artículo, te proponemos un menú zero waste para que puedas alimentarte de manera saludable y sostenible. ¿Estás listo para aceptar el reto? ¡Empecemos!
Utiliza alimentos de temporada y de proximidad
¿Qué son los alimentos de temporada y de proximidad?
Los alimentos de temporada son aquellos que se cultivan y se cosechan en la época del año en la que se encuentran en su mejor momento. Por ejemplo, los tomates suelen estar en su mejor momento en verano, mientras que las naranjas en invierno.
Por otro lado, los alimentos de proximidad son los que se producen en la misma región o zona en la que se consumen. Esto reduce la huella de carbono que se genera por el transporte y ayuda a apoyar a los agricultores locales.
¿Por qué es importante utilizar alimentos de temporada y de proximidad?
Utilizar alimentos de temporada y de proximidad tiene múltiples beneficios:
- Son más frescos: Los alimentos de temporada se encuentran en su mejor momento y tienen un sabor más intenso y fresco.
- Son más saludables: Al consumir alimentos de temporada, estamos consumiendo alimentos que han crecido de manera natural y no han sido modificados con químicos para que maduren más rápido.
- Son más económicos: Al estar en su mejor momento, los alimentos de temporada suelen ser más abundantes y por lo tanto más económicos.
- Son más sostenibles: Al consumir alimentos de proximidad, estamos reduciendo la huella de carbono que se genera por el transporte de alimentos.

¿Cómo puedes utilizar alimentos de temporada y de proximidad en tu día a día?
Para utilizar alimentos de temporada y de proximidad en tu día a día, puedes:
- Investigar qué alimentos son de temporada en tu zona y aprovechar para cocinar con ellos.
- Comprar tus alimentos en mercados locales o directamente al productor.
- Planificar tus comidas en función de los alimentos de temporada y de proximidad.
Planifica el menú con anticipación para evitar desperdicios
¿Te has preguntado alguna vez cuánta comida tiras a la basura? Si la respuesta es sí, es hora de empezar a tomar medidas para evitar el desperdicio de alimentos. Una buena manera de hacerlo es planificando tu menú con anticipación. ¿Por qué planificar el menú? Al planificar el menú, puedes comprar solo los ingredientes que necesitas para las comidas que vas a preparar. Esto evita que compres alimentos innecesarios que terminen en la basura. Además, te permite ser más creativo con lo que tienes a mano e incluso ahorrar dinero al comprar solo lo necesario. ¿Cómo planificar el menú? Una buena manera de planificar el menú es hacerlo semanalmente. Puedes elegir los platos que quieres hacer durante la semana y hacer una lista de los ingredientes necesarios. También puedes aprovechar los ingredientes que ya tienes en casa para planificar tus comidas.
Aprovecha al máximo las partes comestibles de los alimentos
Aprovecha al máximo las partes comestibles de los alimentosCuando se trata de reducir nuestra huella de carbono y disminuir la cantidad de residuos que generamos, una de las mejores formas de hacerlo es aprovechando al máximo las partes comestibles de los alimentos. Aquí te presentamos algunas ideas para que puedas hacerlo:
- Utiliza las hojas y tallos de las verduras: Muchas veces desechamos las hojas de las verduras y los tallos, pero en realidad son partes comestibles y nutritivas. Por ejemplo, las hojas de la remolacha pueden utilizarse para hacer ensaladas o para cocinar, mientras que los tallos del brócoli pueden cortarse en trozos pequeños y utilizarse en sopas o guisos.
- Aprovecha las cáscaras de las frutas y verduras: Las cáscaras de muchas frutas y verduras son ricas en nutrientes, por lo que es una buena idea utilizarlas en nuestras recetas. Por ejemplo, las cáscaras de las manzanas pueden utilizarse para hacer compotas o para dar sabor a infusiones, mientras que las cáscaras de las zanahorias pueden utilizarse para hacer caldos.
- Utiliza las sobras: Las sobras de alimentos pueden ser utilizadas para crear nuevas recetas o para complementar otras. Por ejemplo, si te sobró arroz, puedes utilizarlo para hacer una ensalada de arroz o para utilizarlo como base de un plato principal.
- Utiliza partes de los alimentos que normalmente desechamos: Muchas veces desechamos partes de los alimentos que son perfectamente comestibles. Por ejemplo, las semillas de la calabaza pueden utilizarse para hacer snacks saludables o para darle un toque crujiente a las ensaladas.

Aprovechar al máximo las partes comestibles de los alimentos no solo es una forma de reducir la cantidad de residuos que generamos, sino también de ahorrar dinero y de obtener nutrientes adicionales en nuestra dieta.
Reduce el consumo de carne y opta por alternativas vegetales
Reducir el consumo de carne es una de las mejores decisiones que puedes tomar en favor de tu salud y del medio ambiente. El consumo excesivo de carne roja y procesada se ha relacionado con numerosas enfermedades crónicas como enfermedades cardiovasculares, diabetes tipo 2 y cáncer.
Además, la producción de carne es una de las mayores fuentes de emisiones de gases de efecto invernadero y contribuye significativamente al cambio climático. Por lo tanto, al reducir tu consumo de carne, estás haciendo un gran favor al medio ambiente.

Afortunadamente, existen numerosas alternativas vegetales a la carne que son igualmente deliciosas y nutritivas. Algunas opciones incluyen:
- Legumbres como lentejas, garbanzos, frijoles y guisantes
- Tofu y otras proteínas vegetales
- Frutos secos y semillas
- Verduras y hortalizas
Estas alternativas son ricas en nutrientes y proteínas, y pueden ser utilizadas en una gran variedad de platos deliciosos. Además, al consumir más alimentos vegetales, estás ayudando a reducir tu huella de carbono y a proteger el medio ambiente.
Inténtalo y verás cómo te sientes mejor en todos los sentidos.
Elige envases y embalajes reutilizables o biodegradables
En la actualidad, la generación de residuos es uno de los mayores problemas ambientales a nivel mundial. Muchos de estos residuos provienen de los envases y embalajes de los productos que consumimos y que, en muchos casos, son de un solo uso. Por eso, es importante elegir envases y embalajes reutilizables o biodegradables que nos permitan reducir la cantidad de residuos que generamos.
Los envases y embalajes reutilizables son aquellos que pueden ser utilizados varias veces antes de ser desechados. Algunos ejemplos de envases y embalajes reutilizables son los frascos de vidrio, las botellas retornables, las bolsas de tela y los tupperware. Al elegir este tipo de envases y embalajes, contribuimos a reducir la cantidad de residuos que generamos y a minimizar el impacto ambiental.
Por otro lado, los envases y embalajes biodegradables son aquellos que se degradan en la naturaleza sin causar daño al medio ambiente. Estos envases y embalajes están hechos de materiales orgánicos, como papel, cartón o materiales bioplásticos, que se descomponen de manera natural. Al elegir este tipo de envases y embalajes, contribuimos a reducir la cantidad de residuos que generamos y a minimizar la contaminación ambiental.
Además, al elegir estos envases y embalajes, estamos dando un paso hacia una economía circular y sostenible.