
Descubre cómo se transporta y distribuye el gas natural eficientemente
El traslado del gas natural se inicia en los reservorios y se extiende hasta su punto de destino a través de una elaborada estructura de cañerías, dispositivos de compresión y centros de monitoreo.
El proceso de transporte del gas natural explicado
Como ya hemos mencionado previamente, el gas natural se transporta a través de estructuras conocidas como gasoductos, que consisten en tuberías que permiten mover el gas a largas distancias.
En estos gasoductos, el gas circula a presiones extremadamente altas (entre 36-70 atmósferas). Se realizan exhaustivos controles para prevenir fugas y posibles explosiones. Algunos de estos conductos pueden llegar a medir decenas de kilómetros de longitud y hasta conectar continentes, como ocurre con los que unen África y Europa.
Las tuberías están construidas con acero de alto contenido en carbono (aproximadamente 0,25%), lo que les otorga una gran resistencia y durabilidad.
El camino del gas natural hacia España Un recorrido hacia su llegada al país
El gas natural es una de las principales fuentes de energía utilizadas en España, siendo esencial para nuestro desarrollo y bienestar. La llegada de este recurso a nuestro país se lleva a cabo a través de diversas rutas y medios de transporte que garantizan su suministro constante.
Uno de los principales medios de transporte utilizado para traer el gas natural a España son los gasoductos. Estas impresionantes estructuras permiten el traslado del gas desde países productores como Argelia y Rusia hasta nuestro territorio. Los gasoductos cubren miles de kilómetros y atraviesan diferentes naciones, convirtiéndonos en uno de sus destinos finales.
Otra forma en la que el gas natural es suministrado a nuestro país es a través de barcos metaneros especialmente diseñados para este propósito. Estas embarcaciones transportan gas natural licuado (GNL), el cual es obtenido al enfriar el gas a bajas temperaturas hasta convertirlo en líquido. Una vez en nuestras costas, los barcos metaneros atracan en terminales de regasificación, donde el GNL es transformado nuevamente en estado gaseoso para su distribución.
La ruta del gas natural Transportando este recurso por gasoductos
Transporte de gas natural a través de gasoductosEl gas natural se transporta principalmente mediante gasoductos, que son duraderas tuberías diseñadas para llevar el gas desde los yacimientos hasta su destino final.
El gas natural húmedo contiene una combinación de gases como metano, etano, propano, butano y pequeñas cantidades de otros hidrocarburos, y es extraído de los yacimientos para su posterior transporte.
Antes de ser transportado por el gasoducto, el gas natural húmedo debe pasar por una planta de procesamiento donde se lleva a cabo un proceso de purificación para eliminar los contaminantes y otros componentes, dando como resultado principalmente metano puro.
Este proceso de purificación es esencial para garantizar que el gas transportado cumpla con los más altos estándares de calidad y seguridad.
Procedimientos previos a la entrega
La formación de bolsas de gas se remonta a millones de años atrás, a partir de la descomposición de elementos como el lodo y la materia orgánica, calentados por la corteza terrestre y sometidos a presión, dando lugar a yacimientos de gas. Este es el primer paso para su explotación: la exploración de estos depósitos, para identificarlos, determinar su volumen y evaluar su rentabilidad y los recursos necesarios para su extracción.
Cabe mencionar que los yacimientos de gas pueden encontrarse tanto en tierra firme (onshore) como en el fondo del mar (offshore) y su explotación se realiza, al igual que el petróleo, a través de plataformas. En ambos casos, suelen hallarse a profundidades de entre 1,5 y 4 km.
Otra diferencia importante reside en la composición del gas: puede ser libre, cuando se extrae de forma independiente, o compuesta, cuando está mezclada con otros hidrocarburos (como el petróleo) u otros gases. En este último caso, se aprovechan todos los combustibles y componentes útiles, ya sea como fuente de energía o como materia prima para otros fines.
El camino del gas natural a nuestros hogares
El gas recorre un largo camino hasta llegar a su destino final, y es en este punto donde adquieren importancia empresas como la nuestra, Nedgia, dedicada a la distribución de gas, y las comercializadoras. Durante este proceso, el gas se almacena a una presión adecuada de 16 milibares, gracias a una red de plantas reductoras de presión, para poder ser transportado a través de nuestra red y llegar en óptimas condiciones a hogares y negocios, donde será canalizado y utilizado como fuente de energía en dispositivos como calderas. A continuación, según los consumos individuales, se realizará la correspondiente facturación al cliente por los servicios prestados.
El método de transporte del gas natural una guía informativa
El gas natural, producto de recursos naturales subterráneos, viaja a través de un extenso sistema de tuberías específicamente diseñado para garantizar un transporte seguro y eficiente.
Después de ser extraído de depósitos submarinos o terrestres, el gas natural es tratado para eliminar impurezas y comprimido antes de ser enviado a través de las tuberías.
Este transporte se lleva a cabo mediante una red interconectada de tuberías, que puede atravesar diversos obstáculos geográficos como montañas, ríos y océanos. Estas tuberías están construidas con materiales resistentes y se encuentran enterradas bajo tierra para garantizar la seguridad y prevenir posibles fugas o daños.
La logística del gas natural almacenamiento y distribución
El gas natural es una importante fuente de energía que proviene principalmente de depósitos subterráneos situados debajo de la tierra. Este recurso es almacenado y distribuido mediante un sistema de infraestructura especialmente diseñado, el cual incluye tanto depósitos subterráneos como una amplia red de gasoductos.
Los depósitos subterráneos son instalaciones de almacenamiento estratégicamente ubicadas cerca de campos de gas o en la red de distribución, garantizando un suministro constante y seguro en momentos de alta demanda o interrupciones en la producción. Estos depósitos permiten mantener una reserva de gas que puede ser utilizada en situaciones de emergencia.
Por otro lado, la distribución del gas natural se realiza a través de una extensa red de gasoductos, compuesta por tuberías de acero de alta resistencia que se entierran en el suelo o se sumergen bajo el mar para transportar el gas a largas distancias. Esta red incluye tanto gasoductos principales que transportan el gas desde las áreas de producción hasta los puntos de consumo, como gasoductos regionales y de distribución que conectan áreas cercanas y llevan el gas a hogares y comercios más pequeños.
La distribución del gas en España Cómo funciona
El suministro del gas en España se realiza mediante una amplia y extensa red de transporte y distribución, que abarca todo el territorio nacional. Esta red está compuesta por una serie de infraestructuras, como gasoductos y plantas de regasificación, que permiten llevar el gas natural a todas las regiones de manera eficiente.
El proceso de distribución comienza en las plantas de regasificación, donde se realiza la conversión del gas natural licuado (GNL) a gas natural para su posterior distribución. Este gas es transportado a través de gasoductos de alta presión hasta las distintas zonas del país, donde se encuentran ubicadas las plantas de almacenamiento y las estaciones de distribución.
Las plantas de almacenamiento, estratégicamente situadas, son clave en la garantía del suministro de gas en situaciones de emergencia o en momentos de alta demanda. En estas instalaciones, el gas es almacenado a alta presión y posteriormente distribuido por medio de gasoductos de menor presión hacia las estaciones de distribución.
Desde las plantas de regasificación hasta las estaciones de distribución, se sigue un proceso riguroso para garantizar un abastecimiento constante y fiable para todos los usuarios.